¡Qué bueno es estar en la casa del Señor! Nos reunimos esta noche en nuestro Culto al Altísimo para adorar a nuestro Salvador. El ministerio Tsuarach entonó alabanzas  junto con la iglesia en adoración a nuestro Dios. «En medio de la alabanza Dios habita». Una vez concluido el devocional, el predicador de la noche, César Rosado, expuso la poderosa Palabra del Señor.

Padre de huérfanos y defensor de viudas. Es Dios en su santa morada. Dios hace habitar en familia a los desamparados; Saca a los cautivos a prosperidad; Mas los rebeldes habitan en tierra seca

«Dentro de nuestra realidad está el Señor. Debemos tener la perspectiva de nuestra realidad según Dios. Alégrate, canta, sé justo, alégrate delante de Él. ¿Cuánta alegría ronda en tu casa, en tu trabajo? Dios no se olvida de los que tienen necesidad. ¿Cuántos se han olvidado de muchos? Pero de ti Dios se acuerda. De las viudas también Dios se acuerda. Hay muchos que se sienten desamparados, tristes. Dios de ti se acuerda.

«Muchos creyentes nos metemos a habitar en la tierra seca. A veces nos vemos hasta aburridos. ¿Por qué todo para el creyente es una crisis? Los mismos problemas que tiene el mundo los tenemos también. Pero nosotros tenemos unas herramientas que el mundo no tiene. Tenemos a Dios con nosotros. ¿Por qué continuamos en tristeza? Tenemos que salir de la tierra seca. Dios tiene la solución para nuestros problemas. Consulta con Dios, en tus finanzas y en tu mayordomía», continuó.

Al concluir la exposición de la Palabra, nos reunimos todos en el altar para orar e interceder por las peticiones de oración de nuestros expectadores televisivos y de quienes nos sintonizan por internet. La oración del justo puede mucho, por tanto, estamos convencidos que Dios contestará las peticiones de nuestro corazón, según su buena voluntad. ¡Gloria a nuestro Dios!

 

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