El pasado 19 de septiembre estuvimos celebrando en el templo de nuestra iglesia la trasmisión de la película God’s not dead. Para aquellos que no han tenido la oportunidad de ver esta grandiosa película, la misma trata sobre la dinámica entre un estudiante universitario de filosofía y su profesor, quien es agnóstico. El profesor indicó el primer día de clases que Dios no existía y les dijo a sus estudiantes que debían escribir en un papel que Dios estaba muerto, a lo que este estudiante en particular se resistió porque entendía que no era cierto.

El estudiante comienza una búsqueda para aprender cómo demostrar su punto de vista y, una semana tras otra, le hace saber el mismo a toda la clase. En medio de su discusión, decide preguntarle al profesor por qué odia tanto a Dios. En ese momento, llega la película a su clímax.

¿Odias tú a Dios? ¿Alguna vez, por una situación vivida has decidido negarle? ¿Has pensado dejarlo todo? Dios no tiene la culpa de las cosas que pasan. Tampoco hay respuesta para todas las preguntas que vienen a nuestra mente , pero de una cosa sí podemos estar seguros: Dios está vivo.

¿Qué pasó con la vida del profesor y con su punto de vista? Te invito a que saques un tiempo para poder ver esta película que tocó la fibra del corazón de nuestra iglesia y que establece nuestra creencia más firme: ¡DIOS ESTÁ VIVO!

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