Todo lo que contiene la Biblia es espectacular y extraordinario; desde Génesis hasta Apocalipsis. Cada libro, cada capítulo despierta en nosotros el deseo de leerlo una y otra vez. La Biblia es una fuente inagotable, llena de consejos prácticos que cambian el rumbo de nuestras vidas y de nuestros días, de tal manera que no podemos ser los mismos.
Haré una pregunta como punto de partida: ¿Qué es lo más que necesita la iglesia y el mundo de hoy? La Biblia nos habla de los beneficios que produce un liderazgo bueno y sólido. Las naciones, las familias, los negocios y las iglesias solo son fuertes y permanecen cuando hay un buen liderazgo. ¿Qué quiere entonces hacer Dios en este tiempo? Sencillo: buenos líderes. Utilicemos a Nehemías como ejemplo. ¿Por qué escogió Dios a Nehemías como líder, haciéndolo el copero de un rey pagano? Hay tres razones principales. Veamos:
1. Nehemías era sensible a las necesidades de los que le rodeaban Dios vió el corazón de Nehemías, y lo que vió lo hizo sonreir. Este hombre, aunque no nació en Jerusalén ni tampoco vivía allí, cuando escuchó la voz de sus hermanos que sabían lo que estaba ocuriendo en Jerusalén: noticias tristes de muros derribados, puertas y casas quemadas, la gente deprimida, desalentada y sin esperanzas; ¿qué hizo Nehemías? Se tomó en serio todas aquellas noticias. ¡Los líderes son sensibles a las necesidades de la gente que los rodea!
2. Nehemías era digno de confianza Era un hombre de buena reputación, de tal manera que el Rey Altajerjes le había encomendado su seguridad personal. La Biblia dice: el que es honrado en lo poco, también lo será en lo mucho; y el que no es íntegro en lo poco, tampoco lo será en lo mucho. ¡Dios pone a prueba nuestra fidelidad! ¿Cuáles son las maneras en que Dios prueba nuestra fidelidad?
a) Una de ellas consiste en cómo servimos en el ministerio bajo otro líder antes de darnos un ministerio propio. Él quiere ver cómo tratamos el liderazgo de otro.
b) El manejo de nuestro dinero, recursos, mayordomía y administración, determinan lo mucho que Dios puede bendecir nuestra vida. Si no se nos pueden confiar las riquezas terrenales, ¿quién nos confiará los verdaderos tesoros espirituales? Pídele a Dios que te haga generoso y digno de Su confianza, tal como Él mismo es digno de confianza y generoso.
3. Nehemías estaba dispuesto y disponible Cuando se necesitó un líder, Nehemías dijo: «yo me ofrezco, aquí estoy; envíame a mí». Nehemías era copero, no constructor, pero estaba dispuesto y disponible; él no tenía las habilidades necesarias para ese trabajo, pero sí tenía un corazón dispuesto. Dios lo escogió porque era sensible, de confianza, y porque se había puesto a su disposición.
Dios quiere usarte como líder en tu hogar, tu negocio o tu iglesia. La pregunta es, ¿estás dipsuesto y disponible para dejar que Dios te utilize? ¿Estás listo para el liderzgo? ¿Puede Dios apoyarse en ti?
Por esto y muchas cosas más, decimos que la Biblia es nuestro mayor tesoro: mi libro.
Mi Casa es. . . la Casa de Todos
Por: Ángel Otero
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