La Escuela Bíblica Dominical es un centro de información muy importante para que los niños desarrollen su interés profundo en la búsqueda de la historia y palabra de Dios. Es allí donde sus dudas son contestadas a base de nuestra relación como seres humanos con nuestro Señor Jesucristo. Sin embargo, en el hogar se debe establecer la responsabilidad y compromiso de conocer más a fondo a nuestro Redentor.  Los padres deben cumplir con su primera responsabilidad: educar a sus hijos en la Palabra de Dios, evangelizarles y discipularlos. Más que lo antes mencionado, el ejemplo del día a día impacta. En mi experiencia como asistente de maestra de niños de 7 a 8 años, he podido identificar cuando un niño es educado en su hogar con la Palabra desde temprana edad y los que no.

Nosotros los maestros y asistentes, como Iglesia, tenemos también parte de la responsabilidad de crecimiento. Debemos buscar maneras de concientizar y asesorar mejor a los padres que necesiten un poco más de ayuda en la importancia del Espíritu Santo de Dios. Dentro de mi experiencia, ha sido gratificante el ver el interés genuino de cada niño en cada clase, ver en sus ojos la creatividad y la película que está corriendo en sus mentes mientras le relatas una historia, ver el cómo se viven cualquier participación que ocurra en la clase. Son muchos detalles que, como maestro, se disfrutan porque podemos ver en ellos los próximos líderes de nuestra iglesia y de nuestro país.

Por eso y por muchas cosas más te exhorto a que, si tienes hijos, los traigas a la casa del Señor, no solo a la escuela bíblica, sino a todas las ocasiones que te sean posibles. No hay un mejor lugar donde puedas desarrollar mejor a tu hijo, de forma sana y duradera. Recuerda que tu hijos no son tuyos, sino que son un regalo de Dios y, por ende, debes realizar un buen trabajo porque vas a ser cuestionado si no lo haces. Son un regalo, aprovéchalos al máximo y que cuando crezcan puedan recordar, e inclusive, contarles a sus hijos las cosas maravillosas que hicieron contigo. Vamos a crear líderes de poder, unción, conocimiento y con autoridad de Cristo para impactar a todo el mundo.

Shaliny Quiles- Clase 7-8 años