La Sociedad de Juveniles Manos en el Arado decidió llamar su campaña «Declarando Vida», ya que este es el Año del Despertamiento y hay que declarar que este mundo no está perdido y que en él hay vida, amor, perdón, prosperidad, esperanza, paz, entre muchas otras virtudes que el Señor nos da.

El comienzo de nuestra campaña estuvo a cargo de Ezequiel Colón, quien nos llevó al libro de Ezequiel, capítulo 37, el cual habla del valle de los huesos secos. El predicador nos explicó todo lo que iba sucediendo en la conversación entre el profeta Ezequiel y Dios. Ese pasaje bíblico nos relata cómo la fe del profeta fue la llave para algo grande, cómo bajo el espíritu del Señor profetizo y levantó a todos esos huesos que se llenaron de tendones, luego de carne y luego de piel. Al culminar, el Espíritu de Dios sopló de los cuatro vientos y les dio vida.

Juveniles, tenemos que llenarnos de valor y predicar el buen evangelio, declarando vida y todo lo que no vemos como si fuese real.

Mi casa, la casa de todos

Escrito por: Shaliny A. Quiles