¡Cuán maravilloso es habitar en la casa del Señor! Adoramos junto a Tsuarach en el Culto al Altísimo Nocturno del 18 de enero de 2015. Alzamos manos altas dando gloria a quien gloria merece. Cuando le adoramos cosas extraordinarias pasan: la atmósfera cambia, nuestro espíritu se aviva y se contenta, y nos hacemos susceptibles a la Palabra que Dios tiene para nosotros. El mensaje de la noche fue proferido por los labios del ministro Ezequiel Colón. Por cierto, una exhortación poderosa:

«El tiempo kronos, es el tiempo en minutos y horas: presente, pasado y futuro. Pero el tiempo de Dios (kairos) no es pasado ni futuro, es eterno; es un eterno presente. En el tiempo de Dios (kairos) se ha declarado una palabra. Cuando declaró palabra en génesis, no estaba manifestado, pero luego se materializó en el tiempo kronos. El tiempo kairos es el tiempo dimensional, por el cual se manifiesta en el kronos. Cuando se había dispuesto el evento de la salvación se había declarado en el tiempo eterno, y luego se materializó cuando María concibió, cuando Jesucristo murió y resucitó», explicó.

«Tenemos que empezar con nuestras prioridades. Para que ocurran cambios en tu vida, primeramente tienes que buscar el Reino de Dios, las demás cosas serán añadidas. El problema es que muchos estamos detrás de las añadiduras, en vez del Reino. Hemos dado mayor importancia a la bendición que al que bendice. Tienes que hacer cambios a tu vida. Cambia lo que hablas y con quien hablas. Comienza a orar, la gente lo ve como un castigo, se le hace tan difícil orar; y es una bendición cuando entablamos una relación con Dios», instó Colón.

Tenemos que empezar con nuestras prioridades. Para que ocurran cambios en tu vida, primeramente tienes que buscar el Reino de Dios, las demás cosas serán añadidas.

«Cambia tu terreno estéril y tendrás cosechas. ¿Te preguntas por qué no prosperas?: cambia la siembra. Cambia tu siembra y tu cosecha va a cambiar. Queremos cambios pero no queremos sujetarnos al cambio. Lo que siembras cosechas. Ofrenda por amor y con alegría: Dios ama al dador alegre. Diezmo, es una obediencia y una prueba, “obedeced me en esto. . .”; siembra en este terreno y verás como tus finanzas se han de multiplicar. Yo di mis primicias cuando estaba ‘pelao’, y abonaba hasta completarlo. A los pocos meses mi sueldo fue triplicado. En Romanos 11:16 dice: ‘si las primicias son santas también son la masa restante», exclamó.

«¿Cómo vamos a poder en este año de cambios? Misericordia, es que Dios me libera de todo lo que me merecía por pecador. Dios no te dio lo que merecías. Tenemos que pasar a otros niveles. Vivir bajo la gracia me va a dar todo lo que no merezco. Todo lo que tienes es por gracia. No te lo merecías, esa es la gracia de Dios. Por el favor de Dios, lo que tenías que pelear, Él lo va a pelear por ti. ¿Cómo lo activo? Por fe. No son tus obras, es la fe. Cuando das pasos de fe, la fe mueve montañas, quiebra obstáculos y abraza lo imposible. . . La vida del evangelio es un estilo de vida. Nuestra ciudadanía es de arriba. Somos diferentes», finalizó.

Luego de una prédica excelente de nuestro hermano, procedimos a hacer el llamado. Primeramente, el llamado más importante, el que marca el principio de una transformación contundente en le vida del ser humano: el de salvación. Al abrir el altar para los que quisieran pasar, vinieron voluntariamente jóvenes y adultos buscando lo que no sabían que necesitaban, pero que era exactamente lo que necesitaban. Hicieron profesión de fe. ¡Gloria a Dios! Y de pronto, se hizo llamado para la iglesia, y juntos oramos.

Mi Casa es. . . la Casa de Todos