Esta noche comenzamos dándole toda la Gloria al que se la merece por toda la eternidad y por todo el tiempo. ¿Quién como el Señor que nos ha dado la vida? Después de Él, no hay más nada ni nadie. La exposición de la palabra del Señor estuvo en boca del consejero de la Sociedad de Jóvenes y Juveniles y miembro del Grupo de Avivamiento, Ezequiel Colón, teniendo como versículo base el libro de Filipenses 1:6.

Estar “persuadido” tiene como significado: estar convencido. Cuando escudriñamos la escrituras y vamos al lenguaje original, es la palabra “eloger”, que tiene como significado «convencer». El Espíritu Santo tiene como misión convencerte y siempre lo intentará hacer. El Espíritu Santo está preparado para persuadirte sin importar lo que quieras hacer. Jeremías fue seducido y persuadido por el Espíritu Santo cuando decidió no hablar más del Señor estando en la cisterna. Juan 16:8 establece que cuando Jesús venga, convencerá al mundo de pecado, juicio y verdad. Todo el que dice llamarse cristiano, en un momento dado fue convencido de que no podía vivir sin Dios. El Espíritu Santo también convence de juicio porque nosotros somos la justicia de Dios en la Tierra. En el momento en que conocemos a Dios no solo somos salvos, sino también somos justificados por medio de nuestro Señor Jesucristo. En los momentos tristes no hay palabras que traigan consuelo, solo la intervención del Espíritu Santo lo traerá. De la misma forma en la que Cristo venció la muerte en la cruz, venció toda enfermedad y venció a todo el infierno. Porque Él vive, nosotros vivimos.

El Espíritu Santo trae demostración de poder y testifica a nosotros. La Biblia dice en Romanos 8:16 que somos hijos de Dios y que el Espíritu mismo da testimonio de esto. Pablo establece que aquel que comenzó la obra de Él en ti la terminará y la perfeccionará hasta el día en el que Él venga. La obra que Dios comenzó es buena. En el momento de la creación, al terminar cada día, decía que era bueno lo que había creado. Cuando Dios nos creó, creó algo bueno. Esta obra será perfeccionada hasta el día final. En el tiempo terrenal, puede ser que ese tiempo se haya terminado, pero en el tiempo de Dios apenas comienza. ¿Estás preparado para el tiempo de Dios en el 2015? Esta obra será perfeccionada hasta el día que Dios decida porque quien pone los tiempos es Él. El trabajo en Dios no se puede detener; cuando Él regrese, que te encuentre trabajando. Lo que Dios determinó y estableció, lo cumplirá.

 

Mi casa es la casa de todos