«El amor es una desición», comenzó la pastora. En el Aposento Alto, el domingo 20 de abril, la clase de jóvenes, dirigida por la Pastora Vanessa Torres, fue titulada «Amémonos como Él nos amó». Fue una clase de principios prácticos aplicados en base a verdades teológicas. Dios nos amó, y si Dios vive en nosotros debemos amar consecuentemente. El amor se aprende y se decide. Usamos como referencia la revista El Discípulo.

«En esto conocemos que permanecemos en él, y él en nosotros, en que nos ha dado de su Espíritu. Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo. Todo aquel que confiese que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios. Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio; pues como él es, así somos nosotros en este mundo. En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor. Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero. Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.» (1 Juan 4: 13-21)

La manifestación perfecta del amor de Dios es la muerte del Hijo de Dios. Sin el amor de Dios no puedes vivir.

«Él nos amó primero», continuó Torres. «Dios es amor. Su esencia es amor. Quiere tener una realción perfecta, incondicional, con el hombre. Dios ve en el hombre posibilidades», enfatizó. «La fe es confianza, seguridad, esperanza y entrega. Cuando creimos vino el conocimiento de Dios. ¡Y cuál relación a la que Dios nos invita!», enseñó la pastora. «Cristo habló del Padre y de el conocimiento que tenía de Él». «El amor trae consigo responsabilidad. Jesús rescató la vida eterna para nosotros. El mejor regalo fue la vida eterna mediante Cristo», reiteró. «La primera demostración de amor de Dios es la ética. La segunda es la social. Y la tercera demostración es la teológica. La manifestación perfecta del amor de Dios es la muerte del Hijo de Dios. Sin el amor de Dios no puedes vivir», finalizó.

Amado hermano, le esperamos todos los domingos en la Iglesia de Jesucristo El Caballero de la Cruz, a las 9:30am, en la Escuela Dominical: la espina dorsal de la Iglesia.

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