Freddy Díaz, en el Aposento Alto de nuestra iglesia, dirigió la Escuela Bíblica de jóvenes el 30 de agosto. Con el espacio lleno de estudiantes ávidos para recibir la instrucción, el maestro explicaba los versos de Malquías 3:1-10. Y en su peculiar y efectiva manera de enseñar, mediante anécdotas y experiencias vividas, pudimos entender los conceptos esenciales de la enseñanza. Utilizamos como referencia la revista El Discípulo.

«Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos. Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos. Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las guardasteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos». (Malaquías 3:5-7)

El cambio tuyo y la salvación online slots tuya son bendición a los demás. Después del cambio, tu testimonio.

«Tienes que esperar que Dios te coloque donde Él quiere», sentenció el maestro. Hay oportunidades que se nos presentan en la vida, decisiones que debemos tomar. Sin embargo, nuestra voluntad se la cedimos a Dios cuando decidimos aceptarlo, y donde Él decida allí debemos estar; Dios desea nuestro bien. «Se ha perdido el respeto en el templo. Dios es el mismo ayer, hoy y siempre. Dios no cambia su estilo: Santidad a Jehová, Alabanza a Jehová», explicó Díaz. Es necesario recobrar el respeto, la reverencia y el temor a Dios. Estos son esenciales, son el principio de la sabiduría y fundamento de nuestra relación con Dios y con el prójimo.  «El cambio tuyo y la salvación tuya son bendición a los demás. Después del cambio, tu testimonio», concluyó. El cambio nuestro y el testimonio que damos al mundo es consecuencia proporcional de nuestra relación con Dios.

Amado hermano, le esperamos todos los domingos en la Iglesia de Jesucristo El Caballero de la Cruz, a las 9:30am, en la Escuela Dominical: la espina dorsal de la Iglesia.

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